jueves, 5 de junio de 2014

Extraños

Hay amores que se vuelven extraños y borrosos. Un recuerdo descocido y casi ajeno. Aunque ahora me doy cuenta que siempre fueron algo de eso; incómodos y del todo inciertos. Amores que entonces siguieron su curso extraviado.
O fueron los amores del idilio. Los que te sobrevivieron, que no supiste decir ni morir. Que entonces cambiaron de tierras y de labios.
Y es que hay amores que se vuelven impropios, amores vacíos de sangre. Amores de caricias estropeadas y miradas a destiempo. Todo un montón de abrazos invisibles y de nuevo esta extrañeza agujereándome el recuerdo.
Y es que ya no sé cómo era quererte, añorarte, estar. Ya no.